Se denominan vidrio de seguridad o vidrio seguro, no expulsan astillas filosas, en caso de rotura.
Eso quiere que en caso de rotura no representa un peligro potencial de causar lesiones o heridas de consideración a las personas.
Generalmente asociamos seguridad como sinónimo de protección, lo cual se relaciona directamente con vidrios de los cuales sus propiedades son difíciles de ser traspasados por impactos, ya sea de objetos o personas.
Existen varios tipos de vidrios de seguridad, pero los más ideados por arquitectos y utilizados en construcción son los siguientes.
El vidrio laminado se compone de la unión de dos o más vidrios (láminas) a través de la utilización de un pegamento especial llamado polivinilo butiral o PVB, un material plástico con excelentes cualidades de adherencia, elasticidad, transparencia y resistencia. Con esto se dota a la ventana de una mejora en el aislamiento acústico y también en la seguridad. Esto último es debido a que si por cualquier motivo se rompe el vidrio, los trozos de cristal no se caen y quedan esparcidos por el suelo, sino que continúan pegados al resistente pegamento PVB (como ocurre con las lunas de los coches). De esta forma se aporta protección frente a posibles intrusos en nuestra vivienda y también se previenen accidentes domésticos, al no haber riesgo de cortarse o de clavarse un trozo de cristal.
Es posible hacer diferentes combinaciones con este tipo de vidrios, en el vidrio laminar se pueden disponer de distintos tipos de grosor 3+3, 4+4, 5+5 etc., también diferentes tipos de láminas 4+4+6, 6+4+6, 6+6+4+6 etc., asimismo se pueden combinar con una cámara de aire, aumentando así el aislamiento acústico y térmico.
El templado es un vidrio que se calienta gradualmente hasta una temperatura de entre 575 y 635 grados Celsius para después enfriarlo rápidamente con aire. De esta manera se consigue que el vidrio quede expuesto en su superficie a tensiones de compresión y en su interior a presiones de tracción, confiriéndole mayor resistencia estructural y al impacto que el vidrio sin tratar, teniendo la ventaja adicional de que en caso de rotura se fragmenta en pequeños trozos inofensivos(por lo cual se considera uno de los tipos de vidrio de seguridad).
El vidrio armado es aquel vidrio que se obtiene por el proceso de colado y se le incrusta en su interior una malla metálica en forma de retícula, de manera que, si se rompe, los pedazos de vidrio quedan unidos al alambre evitando su caída y que estos puedan producir lesiones. Esto hace que sea apto para zonas de riesgo y en donde se necesita una seguridad adicional, aunque no se trata de un vidrio antirrobos.